Olympia serie de pinturas al olio

De enero a marzo de 2018

El olor del motor diesel de la pinaza entre Arcachon y Cap Ferret revive mis recuerdos de un caique en el mar Egeo. No sé cómo me llegó este deseo de pintar estas rocas turquesas, vestigios profundos de ciudades sumergidas. Olimpo, montaña poblada por los dioses, visitada por turistas.

Me sumerjo. Contengo la respiración. Dimitri está brazas por delante. Mi amigo griego desaparece en las profundidades. Él traerá una esponja. Yo nada, solo el aliento que extraño. Teníamos 9 años. Fumábamos cigarrillos y bebíamos ouzo a escondidas. Es un país donde la gente se detiene a ver la puesta de sol. Recuerdo Epidauro, Micenas, Meteora. El Drachma soltó en el centro del anfiteatro para probar la acústica. Estas maravillosas vacaciones, que siempre asociaré a una alegría donde la naturaleza se mete a través de la piel, donde el sol nos hace conscientes de nuestra presencia tanto terrestre como acuática.